¿Eres buena persona?

Hoy lloré, no por las víctimas (a ellas les recordarán para siempre sus familiares y amigos), lloré por los héroes, héroes que olvidaron sus cansancios, sus necesidades, sus pobrezas y que aportaron horas de trabajo, viajes gratis, camas de hotel, incluso unos brazos para trasladar heridos. Seguir leyendo